lunes, 13 de febrero de 2012

Tan sólo ella y su reflejo

Se alejaba lentamente hacia quién sabe donde mirando tristemente sus lentos pasos. Avanzaba a paso más bien de animal vagabundo que de persona desolada. Sus ojos estaban fijos en lo que poco a poco iban pisando sus usados zapatos, ya desgastados de tanto huir. No miró ni un sólo instante atrás, pues iba en dirección al olvido. El reflejo de su silueta fue transladándose del agua al suelo, y del suelo al pasto desolado de los alrededores de su antigua mansión. Mientras el sol siga brillando todavía tendremos oportunidad de continuar juntos-susurró para sí misma. Y mientras el sol duró su reflejo y ella siguieron caminando juntos, sin rumbo, sin dirección, dejando atrás aquella casa a la que hace muchos años llamó hogar. Ahora ya no existía ningún vestigio de lo que fue para ella su morada. Su gran y lujosa morada. Ni una gota de humildad se coló por aquellos lujosos ventanales hacia el interior de su ser en tiempos de gloria. Tal vez ese fue el motivo de su ruinoso destino. Tal vez esa fuera la razón por la que ahora, abandonada de toda suerte y patria, volvía cabizbaja a no tener absolutamente nada más que su reflejo mientras brille el sol.

martes, 7 de febrero de 2012

El resurgir




Oh mundo que resurge del lugar más inesperado. Que vuelvan tus hojas a creer estar soñando viviendo aquí, tras los arcos del olvido. Extiendo mis brazos en busca de un rayo dorado, en todas direcciones prolongo mis trazos de una vida surgida de la nada. La fuerza me vio nacer, la esperanza sobrevivir, y el amor al mundo me vio seguir firme, entre las rocas. Salvaje, más que las olas. Sorprendente, por sí sola. Resurgo del lugar más inesperado de nuevo y te tiendo mis verdes suspiros aquí y allá, para que me captures entre muros como si fuese el bosque más bello del lugar. Aquí, este es mi hogar.

sábado, 4 de febrero de 2012

Revoltijos de sombra





Torbellinos de sombras aquí y allí son el reflejo de lo que el sol nos brinda. Espirales de fondo blanco y tez oscura. Uniones forjadas de metal que dejan entrar cada día a la misma persona a su mundo más íntimo. Revoltijos que se abren al salir y se cierran al entrar para guardar la privacidad del ser humano más desconocido hoy por mi. ¿Dónde andará tu autor el día en que te vi nacer en mi interior? ¿Dónde andará hoy tu dueño de ideas y sueños, si ya te perdiste?. Que vuelta a rozar el sol tus líos mañaneros, que vuelva a proyectar tu amor en paredes de hormigón, que vuelva el mañana a encontrarte hoy.