Nous sommes

 Je suis
Topai le
 Ell és
Ella es
We are

Amar sin temor

   Rompamos las cadenas que nos unen a nuestros pasados, rompamos con la fuerza de la rutina, rompamos con la desdichada vida programada, seamos hoy un poco más libres.
   Liberemos nuestra mente de preocupaciones, prejuicios, suposiciones y de acciones que ya han pasado o que nunca pasarán. Volvámonos un poco más intuitivos, más fluidos, volvámonos un poco más a la acción presente. Rompamos hoy con aquello que nos separa del ser puro, del hacer de verdad, del corazón, volvamos a conectarnos con nuestros antepasados, volvamos a conectarnos con nuestro corazón, aquel que nos guía en todo momento por la senda de la Unidad. Demos sin esperar recibir...habla, ríe y AMA sin temor.

Me pierdo, me encuentro

Me pierdo entre tus formas, me encuentro en tu horizonte de linea infinita.

Más alla del cielo

Más allá del cielo, en ascenso continuado hacia el infinito, nos perdemos en el camino para luego encontrarnos en la cima que, más altiva que un avión, espera reposando al sol de invierno.

Me elevo al cielo azul

Me elevo al cielo azul deseando sentir el viento, me elevo a caricias de mar con suspiros de fuego. Me pierdo en el camino, me recupero. Me vuelvo a elevar. Esta vez con más fuerza que nunca, esta vez sin estallar, sin destellear. Sin resbalar. Me elevo al cielo azul deseando mil deseos, anelando mil te quieros, que son y que serán.

Diminuto mundo

Creció de lo indeseado, de lo que todo el mundo desprecia, creció de la negación. Vivió en la oscuridad, donde nadie puede ver nada en absoluto, donde se acaba la penumbra y comienza la ausencia total de claridad. Permaneció quieta, callada, esperando pacientemente. Hasta que una mano la arrancó de esa oscuridad y la condujo hacia el maravilloso mundo del color, de la luz, del hacer y del querer. Renació, resurgió y respiró hondo. Así pues, dispersó todo su color por el mundo, y vivió grandezas, en su diminuto mundo microscópico.

Pequeños sorbos azulados

Mientras esperaba se tomó su taza de te. Le puso 3 azucarillos, uno detrás de otro. Nunca los echaba a la vez, decía que no le gustaba sobrecargar tan de repente a una taza tan pequeña. Esperó, removió y empezó a beber muy lentamente, a pequeños sorbos, podías escuchar como el líquido se filtraba por entre sus cortados labios mientras seguía esperando en aquella cocina azulada.

El solitario desierto de la ciudad

El solitario desierto de la ciudad, a la espera de niños con ganas de jugar, se queda vacío una vez más.

Otoño

Llegada la nueva estación, paseamos tranquilamente por el camino que nos guía. Llegado el otoño, acarician las hojas al suelo, reinan los días donde el sol se esconde entre nubes mientras corren valientes las primeras gotas de lluvia. Caen las hojas lentamente, guiadas por el viento que susurra al verano que ya llegó su fin y que, poco a poco, con el transcurro de los días va avisando al invierno a que cubra con su abrigo toda la ciudad, a que tape con su manta todo cuanto pueda alcanzar. Se siente el frío, llega ya.

Desde lo alto

Se paró el tiempo allá arriba, dejé de sentir frío. Mientras, olvidé el calor. Grafías de todo tipo, escritas cada una con una mano diferente pero siempre en el mismo lugar. Allí arriba, el tiempo se paró allá arriba mientras descifrábamos frases enteras, mientras disfrutábamos de la vista más preciada de la isla, la vista aérea. Desde lo alto, escribiendo palabras desde dentro.

Somos olas

Venimos y vamos, somos olas en el mar que suben y bajan. Somos la espuma que desaparece rápidamente de la arena para volver al mar y de nuevo, aparecer.

A las puertas del cielo

 Llegas a las puertas de la sala, aquella en la que ponen la película que hoy te apetece ver, estás justo enfrente de las cortinas de la sala número 3, el mismo número que dijiste al vendedor de taquilla y que te repitió, unos segundos después, el acomodador con una sonrisa al entregarle tu entrada para que la comprobase. Eliges tu asiento y esperas tranquilamente. Las luces ahora se apagan. Comienzan a venir las sensaciones con las primeras imágenes y con los primeros sonidos. La película ha empezado. La nueva realidad está llegando. Y te sientes un todo con todo aquel que está en la sala. Volver a retroceder en el tiempo, avanzar hasta el futuro y viajar a una isla remota de Indonesia. Volar entre las nubes. Luchar en la Primera Guerra Mundial. Volver a enamorarte. Cabalgar por entre los árboles. Volver a ser un niño. Sentirte un anciano. Transportarte con cada película a un mundo diferente, en pantalla grande. Sonidos que te atrapan a ti y a todos los que estáis hoy en esa sala. Imágenes envolventes, movimientos sorprendentes dirigen tu mente hacia la plenitud que sientes cuando estás adentrado en ese mundo.
   Ahora los créditos empiezan a asomar. La película ha terminado. Un sentimiento de extrañeza te envuelve el cuerpo, es hora de volver a la realidad. Hasta la próxima sesión.

Chaplin genio

Cuando me amé de verdad .. Charles Chaplin

Cuando me amé de verdad comprendí que en cualquier circunstancia, yo estaba en el lugar correcto, en la hora correcta y en el momento exacto y entonces, pude relajarme.
Hoy sé que eso tiene un nombre…”AUTOESTIMA”
Cuando me amé de verdad, pude percibir que mi angustia y mi sufrimiento emocional, no es sino una señal de que voy contra mis propias verdades.
Hoy sé que eso es…”AUTENTICIDAD”

Cuando me amé de verdad, dejé de desear que mi vida fuera diferente y comencé a ver todo lo que acontece y que contribuye a mi crecimiento.
Hoy eso se llama…”MADUREZ”

Cuando me amé de verdad, comencé a percibir como es
ofensivo tratar de forzar alguna situación, o persona, solo para realizar aquello que deseo, aún sabiendo que no es el momento o la persona no está preparada, inclusive yo mismo.
Hoy sé que el nombre de eso es…”RESPETO”

Cuando me amé de verdad, comencé a librarme de todo lo que no fuese saludable…, personas, situaciones, todo y cualquier cosa que me empujara hacia abajo. De inicio mi razón llamó esa actitud egoísmo.
Hoy se llama…”AMOR PROPIO”

Cuando me amé de verdad, dejé de temer al tiempo libre y desistí de hacer grandes planes, abandoné los mega-proyectos de futuro. Hoy hago lo que encuentro correcto, lo que me gusta, cuando quiero y a mi propio ritmo.
Hoy sé que eso es…”SIMPLICIDAD”

Cuando me amé de verdad, desistí de querer tener siempre la razón y con eso, erré menos veces.
Hoy descubrí que eso es la…”HUMILDAD”

Cuando me amé de verdad, desistí de quedar reviviendo el pasado y preocuparme por el futuro. Ahora, me mantengo en el presente, que es donde la vida acontece. Hoy vivo un día a la vez.
Y eso se llama…”PLENITUD”

Cuando me amé de verdad, percibí que mi mente puede atormentarme y decepcionarme. Pero cuando yo la coloco al servicio de mi corazón, ella tiene una gran y valiosa aliada.
Todo eso es…”SABER VIVIR!”

“ No debemos tener miedo de confrontarnos…
…hasta los planetas chocan y del caos nacen las estrellas. ”

Volver al amor

Viendo el tiempo pasar...

What to see

 Hoy veo las estrellas

A rayaduras

Viendo lo que me dejan ver, imagino el cielo por ti.

Ideas que como se encienden se apagan, ideas que iluminan la noche y deslumbran a la mañana siguiente, ideas que despiertan e ideas que te duermen. Ideas de ideal belleza, ideas y sueños.

Nosotras

Somos dueñas del todo y de la nada, somos los seres de nuestra imaginación, somos lo que tocamos, somos quien queremos ser. Somos el viento en las montañas y la brisa suave del mar, somos almas en cada rincón. Somos la luz del universo, somos el cielo y somos la tierra. Somos los árboles dentro del río, somos las rocas tocando el mar. Somos peces en el agua y somos los pájaros que volando están. Somos dueñas del todo y de la nada. Somos nosotras

Camino de hadas

Caminó agarrada al suelo,
continuó mirando al cielo,
buscó entre los árboles su sonrisa
cayó como hoja con la brisa.

Lanzó un suspiro al aire del olvido,
cantó mil anhelos sin prisa
se estremeció ante un canto de risa
revolotear de mientras un pajaro escuchó.

Desató sus penas entre ramas,
deslizó sus pies que desgarraban
amargados del camino de hadas
la verde caida de su piel.

Perdida entre destellos
soles que emanaban calor
deshaciendo sus nudos
su pelo al aire soltó.

Pagoga

Cuando me iluminó, la visión del todo penetró en mis adentros, subió hasta mi cabeza directa del corazón y dibujó en mi rostro una sonrisa de armonía y paz que jamása olvidaré. Cuando me iluminó se acabó la oscuridad interior y resurgío la luz de la alegría en mis adentros.

Again

Cielos desmesurados para mentes que se desmoronan en el horizonte perdido del futuro presente. I give you a present, the future. Golpea mi puerta y grita mi nombre.

Deloused

Don diego Donde andará donde digo Diego donde está?

Luz de la esperanza

 La luz de la esperanza, el rayo de la ilusión. Desafiando a la oscuridad vence el blanco de la claridad.

Resacas del ayer

Carraspeo los dientes y los dedos se me agarran bien fuerte a la silla. Voy tentando a la suerte sentada sobre el lecho de la muerte. Mientras el sol va colándose por la ventana, me levanto lentamente sin saber bien cómo ni porqué y me dirijo directa al abismo del día tras día. Cuando se olvidan los deseos y vuelve la amargura del presente, cuando perece el corazón destrozado por la química del ayer, cuando hoy no es más que el reflejo de un ayer que se olvida lentamente...

De mis gargantas

Despeñados del abismo que todo lo ve, me escondo tras el fuego traicionero esperando al agua tardía de lluvia que apague al liberar de iras, que esperan sosegadas no arrancar jamás. Despeñados los caminos del destierro, vagando entre cenizas del olvido, vagando van cayendo los sin sentidos del ayer, al olvidar el irse quizás mañana vengas hoy. Descansos olvidados, cansancios recordados, dormitan los senderos de la garganta de la sierra. Sierra que es serena al despertar, sierra que es serena al descansar, sierra que hace a uno levitar.

La perfección del presente

Te de verano

Te da la vida mientras bebes, miras y ries entre vapor dorado de aromas asiáticos. En abundancias de calores y reflejos, en demasías veraniegas, sorbo a sorbo nos llenamos de la energía del sagrado ritual.

Películas sin final

Esperando el final del día que no acaba para continuar con las aventuras que te brinda la vida. Películas sin final que prosiguen entre gentes, músicas y coches accidentados. Películas sin final que trascienden entre discotecas y calabozos, entre movimientos y descansos, entre despertares y sueños profundos. Avanzando estamos sin pararnos a desear más tristezas, pues la vida es felicidad pura y novedosa, pues la vida son sueños y melodías harmoniosas.

Corta de tallo y larga de belleza

Sobre lineas de realze infinito se posa la flor del camino. Aquella que mira y espera a que llegue la mano que ansíe tocarla, y ser transportada al siguiente sentido. La flor que huele a color, la flor que es suave de amor, la flor perfecta que reposa en tallo corto y pétalo largo sobre los colores de una mesa retocada por el paso del tiempo y caminar del viento. Bajo los sabores de un cielo que se imagina poder tocar, ella está abierta al sol y al nuevo amanecer.

esclavos

Sentimientos esclavos de miradas perdidas, luciendo el ombligo de la flor marchita, parpadeando al unísono del monótono silencio, viendo caer el viento en cada movimiento. Espejos del alma que todo lo ven y nada lo miran, cariños al alba del alma perdida. Caemos sin sol al mar indebido, volando un clamor de deseos sin hilos. Desinhibo. Me olvido. A contracorriente navengando van los míos más grandes placeres del vivo. Vivo placer queriendo volver, queriendo nacer y queriendo correr sin dolor, hacia y en dirección a mi sol. Amaneciendo calores de noches bebidas en vasos de barras de bar y cantos de la cigarra que no se apagarán jamás. Y un nunca desterrado del cielo vuelve a sonar deambulando y en soledad entre las esquinas del callejón de aquella ciudad que no dejarás de visitar. Jamás o nunca no volverán, ahora y aquí son hoy la verdad.

Me siento

Me siento, respiro y respiran mis adentros. Hoy despiertan mis sueños al acabarse el momento de reposo. Respiro y respiran mis adentros. Sentada obserbo la luz y el tiempo, sentada me siento.

Alive

Fuerzas sinuosas de entramado peligroso. Resquizios de verde vida que va tornándose más y más marrón. Peldaños encaramados que unen el cielo y la tierra con su vida. Parados entre dos carreteras, resurgiendo del césped, descansan simplicidad en su forma, derraman belleza de sutil aroma tropical. Pequeños peldaños que suben al cielo, mientras nuevas ramas nacidas de la perfección esperan embelleciendo el viento y la ciudad a ser cortadas. Y todo, de nuevo, vuelve a empezar. Del cielo a la tierra y de la tierra al cielo, esperan deslumbrantes las palmeras de la libertad.

Fugaz pero absoluto

Sintiendo el cielo entre mis manos y acariciando el agua con la mirada veo como fluyen mis pensamientos de alegría y de sosiego. Días de calma, días de gloria. Veo como se va apagando la luz a medida que pasan las horas mientras espero a un nuevo día llegar entre silencios de bienestar. Me paro a descansar y pienso en un mañana que mejor que ayer me espera tras la linea del horizonte lejano. Ni un segundo de duda ante tus pies, ni un segundo de bruma que me robe la fe. Ahora descanso pero continuo avanzando, despacio muy despacio hacia dónde el corazón me dicta las órdenes del destino.

Verdes, blancas o amarillas

Nos paramos en el tiempo para seguir disfrutando del momento.
Nos callamos y nos miramos, nos entendemos.
Compartimos más de lo que nosotras pensamos.
Vivimos y sonreimos, nos alegramos. Hacemos tanto y cuanto amamos.
Seguimos caminando por la senda de la vida llegando juntas, comiendo juntas y durmiendo juntas.
Cantamos y bailamos, disfrutamos.
Derrochamos en cada momento a las gentes nuestra espontaneidad, decidimos no planear.
Bebemos y descansamos, nos hablamos.
Continuamos juntas de noche y de día, sin saber lo que nos depara la vida.
Continuamos juntas, aquí y allí. 
Nos abrazamos y nos consolamos, nos amamos.
Nos queremos,
verdes, blancas o amarillas.

REcuerda olvidada

Cuando me dejo llevar por ti, se para el tiempo, caen las estrellas del firmamento. Directas a mi ventana, mi alma se abre de par en par.

Arte se es

Estampados de alegría, estampados de colores. Granada en toda su esplendor, relucen los topos en las calles al sol. Perdiéndonos entre sus calles, perdiéndonos en sus colores que huelen a la verde esperanza del amor. Dulces deleites al aire, vuelan los colores al viento. Suaves aromas de romero, geranios que escapan con sus petalos rojos. Entre calles, la Alhambra descansa tranquila en su bonito manto verde esmeralda. Se asoma entre pasos, dejándose ver entre muros. Brisas de flamenco, artes de guitarra y zapateados de fuerza, suenan conversaciones de arte entre las gentes. Arte se oye, arte se siente y arte se es, Granada.

Trazando

Cogiéndo a la vida entre los dedos, no se escapa ni un sólo momento verde entre azules pasajeros y blancos que corren con el viento. Cogiendo al mundo entre las manos, tranzando momentos ilusorios como cosiendo la tela sin necesidad de enebrar la aguja del pensamiento. Nos acercamos, nos alejamos y nos dejamos querer y hacer. Llevamos en nuestro ser más interior, la fuerza del querer. El suspiro de la esperanza. Cogemos a la vida entre los dedos y pintamos con ella cuadros sin leyes y dibujos sin formas concretas. Tranzando, simplemente trazando.

Pirados al agua
Y con amigos así que más se puede pedir.

Hablando silencios de amor

La miré como si fuera la primera vez que la veía. Lenta muy lentamente ondeaban sus pétalos al viento hablando silencios de amor. Suave muy suavemente me fui acercando cada vez más para observar su centro sagrado en equilibrio. Esa forma que me resultaba tan familiar como desconocida, perfectamente en equilibrio con mi mirada, se dejó acariciar por la extensión de mi ser. Y mis dedos se posaron en su tallo, de tacto aterciopelado. Y mis dedos acariciaron esa linea vertical, que unía el cielo con la tierra. La volví a mirar como si fuera la primera vez que la veía y no supe qué responer a su compleja armonía. No supe más que observar, acariciar y sentir. Mientras ella hablaba, yo escuchaba silencios de un amor que vive en todas y cada una de las formas que la componen. Y mientras, el tiempo se paró a nuestro verde alrededor.

  Mágico,
entre nubes,

el Galatzó despierta a los dormidos con su fuerza.


Laura sí está

Burbujas albinas

Espera blanca entre bambalinas, sueños que van trepando alrededor de un mundo nuevo para nosotras. Retoques mágicos que irradian ilusión y esperanza. El rostro como lienzo y el cabello como el material de la escultura más valiosa, la mujer. Mientras artistean los peines y el carmín rojo amapola, van pasando imágenes de luz blanca, de tan blanca pura. Pureza que inundó el día hasta bien entrada la noche. Pureza blanca que desfiló contenta sobre el escenario de la vida, al son de la canción y el ritmo de la alegría.

Aceras

Como si de un espejismo se tratase, la sombra hacía lejana la realidad.

Las luces de la noche

Las luces de los semáforos tiñen de verde, rojo y amarillo la ciudad que descansa apagada de tonos en la oscuridad. Luces intermitentes, luces que van y que vienen, Sombras de coches que pasan y cambian de color, Unos faros que se acercan lentamente hacia mi, mientras espero a que el muñequito cambie de color y posición, mientras espero ya tidi parpadea, el suelo y las casasm la barandilla. Mientras espero yo cambio de color segundo a segundo. Ahora mis manos están verdes, y mi pelo y mi blusa. La ciudad de noche, las luces que el sol tapa de día con su brillo. Las luces que no se ven, las luces que muchos no miran. Las luces de la noche

Parada

Por primera vez en mucho tiempo no me paro delante de un escarate para mirar lo que se vende sino para comprar lo que se dice. Por primera vez en algún tiempo me he parado para observarme y colocarme la flor de la mañana en mi cabeza despejada de ruidos. Y ahora me quedo quieta, mirando como pasa la gente, sin importarme hacia donde van, pues sólo veo luz. Parada en estas escaleras veo mi realidad desde esta nueva perspectiva. Siento música, viento y siento el calor del sol rozando mi pierna izquierda que reposa algo enmurollada en el segundo escalón. Y mientras, la flor blanca espera a volver a estar entre mis manos para llevarla de paseo a quién sabe dónde.
Parada. Estiro la pierna y descanso plácidamente con la flor, mientras observo como danza el bolígrafo sobre las lineas de la inspiración divina. Parada.

Demuestra que no eres un robot

Demuestra que no eres un robot.... Nunca pensé que un robot me pediría que le demostrase que no soy un robot. Soy un robot? No, no? Vale, dudo luego no. No lo soy... no.. mmmm... NO.


lo soy? NO, no lo soy.

Pero, si no entiendo la primera palabra, soy un robot? No entiendo la primera palabra. Soy un robot?

NO jajaja

Camina Lola camina

Duermen desesperadas sus alas,
duermen esperando sus ganas,
brotan de mi esas ansias,
de echarme contigo a volar.
Hoy despierta mi hermana,
hoy desvanece el malestar.
Duermen despiertas tus alas,
duermen aquí sin descansar,
vuelan de amor sin desgana,
buscan sentido al azar.
Vuela alzan mi llamada,
Vuelan libre a ningún lugar,
Vuela alzando tu llama
Canta y ríe,
mi Libertad.

Gigantes del viento

Vengo y voy,
Tocando el presente, enfocando el pasado. Olvidando el futuro.
Rueda el viento, cae el deseo, vuelve la brisa sonando a lo lejos.
Mirando cerca, paseando lento, abriendo fuegos, desvaneciendo miedos.
Tomo la senda, rozando mil senderos, zozobrando hoy no quiero perderme en mil lamentos.
Siento el vaiven del andar, siento las miradas penetrar. A fuego lento, a calor intenso.
A fuego denso, a clamor de cielos. Vengo y voy. Bailando estoy.
Vengo y voy, viviendo soy.

Vuelvo de nuevo

Vuelvo por fin, cogiéndote entre mis dedos. Hoy vuelvo aquí para perderme de nuevo y para siempre entre tus letras, para sostenerme entre tu mirada y penetrar en un segundo de tu paz. Ahora ya sé cómo ver a través del cielo, ahora sé como tapar el sol iluminando tu mirada. Vuelven a brillar las flores cuando miras más allá, vuelven a brillar sonrisas de plenitud en esta inmensidad.

Ondeaba al viento su rizada melena mientras esperaba mirando al infinito vislumbrar entre las agitadas olas, al que ella llamaba, su mejor compañia. Esperaba sentada entre rocas moldeadas por la fuerza del agua en tiempos remotos. Siempre regresaba a la misma hora. Y cada día de cada semana ella bajaba quinze minutos antes por si casualmente se adelantaba. Cogía su toalla, y en el mismo lugar la extendía luchando contra el viento para después relajarse encima de ella y dejarse acariciar por la brisa de las cuatro de la tarde. Había preparado té. Siempre preparaba te.

Florece

Impecables se abren a deshora, cuando el tiempo lo pide sin
exigir puntualidad. Cada año como ninguno regalan aromas y paisajes teñidos de
un blanco tan puro como la nieve. Aquí y allí, arriba y hacia abajo buscando un
rayo de sol primaveral. Anuncio de la nueva estación naciente, las primeras
flores se anticipan, las últimas corren por alcanzar a las primeras. Y siempre
hay algún rezagado que ve como su hermano deja ya caer los pétalos de sus
hermanas las flores al suelo verde de fertilidad. Dicen que sus pétalos son las
lágrimas de una princesa, o que su cuerpo es el poder de un rey al cumplir el
deseo de su hija. Dicen de ellas mil historias, aun quien más habla es la
belleza que desprenden sus alas, blancas al sol, alegres al cielo y rosas de
corazón. Distrayendo a las abejas viven ellas, felices entre ramas. Dilucidando
entre el frío y el calor del inestable febrero se despojan de los frutos, las
ramas perecedoras de tan pesada armonía, que pronto caerá para dar paso al
verde que ansía la vida.Ya llegaron mis almendros en flor, ya llegaron como se
fueron hoy.

Tan sólo ella y su reflejo

Se alejaba lentamente hacia quién sabe donde mirando tristemente sus lentos pasos. Avanzaba a paso más bien de animal vagabundo que de persona desolada. Sus ojos estaban fijos en lo que poco a poco iban pisando sus usados zapatos, ya desgastados de tanto huir. No miró ni un sólo instante atrás, pues iba en dirección al olvido. El reflejo de su silueta fue transladándose del agua al suelo, y del suelo al pasto desolado de los alrededores de su antigua mansión. Mientras el sol siga brillando todavía tendremos oportunidad de continuar juntos-susurró para sí misma. Y mientras el sol duró su reflejo y ella siguieron caminando juntos, sin rumbo, sin dirección, dejando atrás aquella casa a la que hace muchos años llamó hogar. Ahora ya no existía ningún vestigio de lo que fue para ella su morada. Su gran y lujosa morada. Ni una gota de humildad se coló por aquellos lujosos ventanales hacia el interior de su ser en tiempos de gloria. Tal vez ese fue el motivo de su ruinoso destino. Tal vez esa fuera la razón por la que ahora, abandonada de toda suerte y patria, volvía cabizbaja a no tener absolutamente nada más que su reflejo mientras brille el sol.

El resurgir

Oh mundo que resurge del lugar más inesperado. Que vuelvan tus hojas a creer estar soñando viviendo aquí, tras los arcos del olvido. Extiendo mis brazos en busca de un rayo dorado, en todas direcciones prolongo mis trazos de una vida surgida de la nada. La fuerza me vio nacer, la esperanza sobrevivir, y el amor al mundo me vio seguir firme, entre las rocas. Salvaje, más que las olas. Sorprendente, por sí sola. Resurgo del lugar más inesperado de nuevo y te tiendo mis verdes suspiros aquí y allá, para que me captures entre muros como si fuese el bosque más bello del lugar. Aquí, este es mi hogar.