jueves, 28 de febrero de 2013

Rumbo a ninguna parte





Pasando sin mirar
andando sin ver
corremos sin rumbo
rumbo a ninguna parte.

Minuto en el atardecer
momentos sin nada que hacer
volviendo el mundo a enrojecer
por ver tu sonrisa crecer.

El Callejón no tiene salida, el callejón no lleva a ninguna parte. El callejón me para en su medio para dejar que le obserbe, su luz y su sombra, su estrecho y su ancho, su eterno equilibrio. Lucen las luces apagadas pues el sol ilumina el día, luces que luces más cansadas que no terminan hoy su poesía. Enciéndeme un suspiro, apágame en grito. Descríbeme el infinito y pinta de azul el bosque perdido. En el mar se pierde mi vista, en mi vista el mar aparece. Descendiendo y ascendiendo, suave brisa, enloqueciendo sin prisa.

No hay comentarios: